El Senado convalidaría este viernes a la Diputada Lorena Villaverde como Senadora de la Nación por La Libertad Avanza, pese a las impugnaciones que sufrió por sus vínculos con el presunto narco Fred Machado, extraditado a Estados Unidos, y por haber estado procesada en ese país, hace 20 años, en una causa que se abrió porque la detuvieron con más de medio kilo de cocaína en su poder.
La suerte de Villaverde, cuyo sostenimiento fue la primera misión que se impuso Patricia Bullrich como presidenta del bloque libertario en la Cámara Baja, se resolverá en una votación para la cual LLA contaría entre 19 a 20 votos propios (ella no puede autovotarse). También dispone del apoyo de buena parte de la UCR: los mendocinos Mariana Juri y Rodolfo Suárez; el correntino Eduardo Vischi; la chaqueña Silvana Scheneider y la santafesina Carolina Losada.
También habrá aporte de los gobernadores de Misiones, Santa Cruz, Neuquén, Salta, Tucumán y Chubut.
Con ese conteo cuenta Bullrich para afirmar la posibilidad de ganar la votación en el recinto, el principal objetivo de la flamante senadora, que tomó esta controversia como el primer test para su conducción del oficialismo en la problemática Cámara Alta, que preside la Vicepresidenta Victoria Villarruel, duramente enfrentada con el Presidente Javier Milei.
Los vínculos de Villaverde con el narco
Villaverde tiene vínculos estrechos con Claudio Ciccarelli, primo y supuesto testaferro de Machado, el empresario argentino que financió la campaña de José Luis Espert y que hoy aguarda un juicio por narcotráfico en Texas.
Cicarelli se define como «muy amigo» de Villaverde; en Río Negro se dice que son pareja y socios comerciales. Además, la Diputada es investigada por irregularidades en la venta de terrenos en el balneario de Las Grutas.
Por otra parte, según documentos judiciales de Estados Unidos que dieron a conocer diversos medios, Villaverde estuvo detenida en 2002 en el Estado de Florida en un expediente por drogas que luego fue desestimado por la Justicia, pero por vicios procesales: nunca llegó a tener una sentencia. La Diputada sostuvo que los cargos fueron “una trampa” y las circunstancias habrían sido una entrega de droga vigilada por las fuerzas de seguridad de ese país, justamente para desbaratar una red narco.
DIB

